4 grandes razones por las que deberías tener entrenador

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1. Para contar con la mejor información

La mayoría de corredores populares se autoentrenan, a menudo haciendo uso de información que encuentran por la red. Sin embargo, hay tantas fuentes y tanto «plan de entrenamiento» disponible, que lo más fácil es equivocarse y cometer muchos errores en tus entrenamientos. Y obviamente esto se traduce en peores tiempos, lesiones, etc.

¿Este entreno me está ayudando a mejorar o debería aumentar un poco más la intensidad? ¿Debería hacer más volumen semanalmente? ¿Debería descansar hoy? ¿Cuántos días de taper hago antes de esta carrera? Un entrenador te contestará estas y todas las preguntas que tengas y sobretodo, se asegurará de que todos los entrenos que hagas cuenten para algo.

Disponer de un entrenador no sólo te dará la paz mental que necesitas durante tus entrenos, si no que a menudo es el camino más rápido y seguro para lograr tus metas como corredor.

2. Para minimizar el riesgo de lesiones

Hay estudios que aseguran que anualmente hasta un 80% de los corredores sufren algún tipo de lesión, y cuando se da el caso, debemos «aparcar» nuestra sesiones durante unos días o en el peor de los casos, una temporada.

Esto a menudo se ocasiona por desinformación sobre cómo realizar tus entrenos, así que tu entrenador no sólo te ayudará a progresar adecuadamente, sino que lo hará minimizando el riesgo de lesiones, adaptando progresivamente las cargas e intensidades de tus entrenos.

Cuando te lesionas menos, puedes entrenar más constantemente, y cuanto más constantemente entrenes, antes te convertirás en mejor corredor.

3. Para mantenerte constante en tus entrenos

Aristóteles una vez dijo:

«Somos lo que hacemos día a día; de modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito.»

La clave para todo progreso es avanzar regularmente y en el running no es una excepción. La única manera de progresar es cumplir entreno tras entreno, kilómetro tras kilómetro. Si tienes entrenador y te comprometes con él, te aseguras un extra de motivación para cuando las piernas pesen y sumar volumen se haga más difícil.

En esos días, en los que cuesta levantarse de la cama o en los que quizás te de pereza meterte bajo la lluvia para salir a correr, si no lo haces no solo te estarás fallando a ti mismo, sino que también le estarás fallando a tu entrenador.

4. Para correr siempre al máximo

Tus victorias son sus victorias, por lo que tu entrenador será tu motivación, inspiración y punto de apoyo. Además, contar con su ayuda te permitirá correr siempre al máximo.

Cuando entrenamos por libre corremos el riesgo de perder de vista la realidad y no hay nada como disponer de alguien que pueda evaluarte objetivamente desde fuera.

Tu entrenador te exigirá tu 100% cuando no lo estés dando todo y te frenará cuando vengan los grandes momentos de euforia.

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